viernes, 12 de diciembre de 2014
EL CUIDADO DE LOS ARBOLES FRUTALES
martes, 4 de diciembre de 2012
Usado por su rápido crecimiento y fácil adaptación a todo tipo de terrenos.
Nombre científico, Cupressocyparis leylandy, viene asignado con el siguiente criterio:
Cupressocyparis, de Cupressus y Chamaecyparis, géneros de los que procede.
Leylandii, en honor de C. J. Leyland, quien descubrió el híbrido.
Actualmente, mediante polinización artificial, se han obtenido diversos clones con ligeras diferencias en cuanto a color de las hojas, velocidad de crecimiento o porte. Planta SIN púas peligrosas. NO tóxica. Muy brioso y resistente a las enfermedades, a medida que van creciendo la adaptabilidad al terreno es más lenta.
MORFOLOGÍA:
Altura: entre 20 y 25 metros
Tronco: Diámetro: 50-60 cm.
Hojas: Perennes. Se presentan en ramillos con forma de escama, ligeramente aromáticas. Son de color verde oscuro, algo más pálido en el envés, opuestas y decusadas en nudos muy próximos, persistentes, simples, de 1,5-3 mm longitud, escuamiformes, ovadas, de base ancha y decurrente, con una glandulita resinosa poco conspicua en el dorso, aplicadas a los breves entrenudos de forma que casi no se ve el tallo.
Flores:
Conos masculinos: solitarios, terminales, de 3-5 mm de longitud, con forma de ovoide y color amarillento.
Conos femeninos: solitarios, terminales y poco conspicuos
Conos femeninos maduros (piñas): de hasta 2cm de diámetro, con forma globosa, formados por cuatro pares de escamas seminíferas decusadas, leñosas, que se separan entre sí al madurar, dejando salir las semillas.
Semillas:
Se encuentran en conos de unos 2 cm de longitud, con 8 escamas de 5 semillas con diminutas vesículas resinosas. Al ser un híbrido las semillas son estériles.
Raíces:
No son muy agresivas solo los ejemplares muy grandes pueden levantar los ladrillos del suelo, pero sí son invasivas para otras plantas y cuando son grandes impiden el crecimiento de otras cerca de ellos. De todas formas al utilizarse en la formación de setos no suelen dar problemas.
Multiplicación:
Propagación por estaquillas semileñosas con talón a finales de verano, en lugar protegido del frío.
CARACTERÍSTICAS:
Resistentes a: Heladas, Salinidad, Sequía media y Viento Poda: si se realizan podas de formación y mantenimiento regulares, a finales del verano o principio del otoño, admitirá bien los recortes y se evita tener que realizar podas fuertes o drásticas posteriores.
La poda de formación: se basa en dirigir la planta hacia su forma natural manteniendo la rama guía.
La poda de mantenimiento: consiste en realizar el aclareo y despunte de ramas y la limpieza de hojas secas. Si se desea cultivar como seto, es conveniente mantenerlo a una altura mínima de 2 metros
No es recomendable plantas muy grandes, de más de 1.50 metros, ya que y tardan más en enraizar. Plantas de 30 a 125 cm, son adecuadas para un rápido establecimiento del seto. Plantas más pequeñas estarán poco endurecidas con lo que suben las posibilidades de fallo. Tampoco las que vengan directamente de invernadero, son demasiado tiernas y susceptibles a las condiciones medioambientales,
Para conseguir un cierre bien tupido, se deben plantar a una distancia de 60 cm a 1.00 metro unas plantas de otras, las distancias menores consiguen que el seto "cierre" antes y un menor vigor en la edad adulta, por tener menos luz y alimento disponible para cada planta. Una mayor distancia permite un mayor crecimiento de cada una de las plantas con un mayor gasto en mantenimiento por aumentar la frecuencia de las podas. Mejora mucho el crecimiento del primer año, si en el hueco de plantación aplicamos un abono de lenta liberación. Al ser de lenta liberación, los nutrientes se liberan cuando la temperatura sube, por lo que están utilizables en el momento en que la planta los precisa.
CONSEJOS:
Abonado: Realizar un abonado en otoño y otro en primavera con un abono NPK.
Al ser muy vigoroso, no es recomendable para jardines pequeños ni para hacer setos de media altura (1.00- 1.50 metros), es una especie ideal para hacer pantallas cortavientos dejándolos sin podar, para por ejemplo, proteger una finca de los vientos del norte, y también para hacer setos altos, perfectos para tener mayor privacidad.
En suelos calizos es preferible injertarlo sobre Ciprés común, a diferencia de los otros cipreses, rebrota muy bien sobre madera vieja.
Puede verse afectado por cochinillas y hongos, siendo el más común phitophtora. En la fotografía se puede apreciar el aspecto que adopta el árbol afectado por dicho hongo
Cómo producirlos nosotros mismos:
Durante el invierno y después de las primeras heladas se realizan las estaquillas de ramitas del año de más o menos de unos 12 centímetros, la base de las mismas se tratan (unos dos centímetros) con una fitohormona para mejorar el enraizamiento. A continuación se colocan en una bandeja con sustrato de enraizamiento situándolas en invernadero no dejando que las ramitas se sequen mientras no salgan las raíces. Si las temperaturas son muy bajas se enciende la calefacción. El tanto por ciento de enraizamiento es variable de un año a otro dependiendo de muchos factores, entre ellos la climatología. Pasados unos meses, cuando las raíces ya ocupan buena parte del alveolo de la bandeja, trasplantamos cada planta a una maceta más grande y se sitúa en el exterior sin ningún tipo de protección.
Para evitar las malas hierbas, lo mejor es formar una cubierta de cortezas de pino, de esta forma, además conservamos más la humedad y evitamos regar con el consiguiente ahorro de agua, siempre teniendo en cuenta que este árbol no necesita mucha humedad.
Antes de plantar Leylandiis, tener en cuenta que el terreno debe tener un buen drenaje para prevenir la aparición de hongos y obtener un buen crecimiento del seto.
Autor Mª Jesús Remis I.T.A. En Explotaciones Agropecuarias. Técnica en Dirección y Gestión de Empresas.
domingo, 17 de diciembre de 2006
TRATAMIENTOS DE ARBOLES FRUTALES
miércoles, 13 de diciembre de 2006
PODA DE FRUTALES DE PEPITA
(frutales de pepita)
Manzana Pera Menbrillo
Estos frutales reciben tres tipos de poda:
- Poda de Formación.
- Poda de Limpieza.
- Poda de Fructificación.
Poda de Formación:
Se realiza durante los 3 ó 4 años desde que se pone plantón de 1 ó 2 años de edad. Es casi imprescindible hacerla y su objetivo es conseguir una forma adecuada.
Una vez que el árbol está formado se acaba este tipo de poda. A partir de entonces sólo se practica, anualmente, Poda de Limpieza y Poda de Fructificación.
Las ganas de entrar en producción y de recoger los primeros frutos, conducen con demasiada precipitación a actuaciones como arqueamientos y a dejar un exceso de ramas productivas, cuando el árbol debería todavía crecer en todas sus dimensiones para alcanzar el volumen productivo previsto. Etas son las formas recomendadas para cada especie.
Manzano.......... Vaso, Eje cetral, Palmeta y Cordones
Membrillero.... Vaso, es lo mas tipico; tambiem en palmeta.
Peral............... Piramide, Vaso, Palmeta, Eje central y Cordones.
En Peral y para localidades de clima caluroso se recomiendan las formas libres y si están demasiado sometidas al viento, las pirámides. Del mismo modo se prefieren las formas libres en los terrenos muy ricos y profundos. Sin embargo, en climas húmedos, expuestos a las heladas tardías primaverales y las tempranas otoñales, convienen las Palmetas y Cordones, y si el terreno es poco fértil y superficial, también convienen en general estas formas pequeñas.
Poda de limpieza.
Se hace en todas las especies frutales y durante todos los años de vida del árbol, aunque sólo sea un simple repaso para eliminar cuatro ramas secas. La época es el invierno, pero también el resto del año.
Consiste en quitar elementos tales como:
Chupones Sierpes
Ramas secas, enfermas, dañadas o rotas.
Tocones secos: son trozos de ramas que no tiene brotes y están muertos.
Chupones: son ramas que sobresalen mucho del arbusto por su exceso de vigor y no dan fruto. Sierpes: son brotes vigorosos que salen del pie del árbol o de la raíz y se deben eliminar.
Ramas cruzadas, mal orientadas o que enmarañan la copa. Se trata de dar luz al interior y aireación.
En verano, una poda puede resultar muy eficaz para controlar el exceso de ramos vigorosos en el árbol, recomendando la supresión de los mismos.
La poda de fructificación es aquella que se efectúa una vez que el árbol ha alcanzado su tamaño definitivo, cuando ya está formado. Aunque a partir del 3er año se solapa la Poda de Formación y la de Fructificación.
Las formaciones que nos encontramos en FRUTALES DE PEPITA (Peral, Manzano, Membrillero) son:
• Ramos
• Brindillas simples
• Brindillas coronadas
• Chupones
• Dardos
Rama de manzano con bolsas
Es un engrosamiento que se forma cuando tiene unos años. En el dibujo superior vemos varias bolsas en una rama. Lleva dardos y brindillas coronadas. Son elementos de fructificación permanentes en las especies de pepita. No se podan. Por tanto, los frutos van a ir sobre lamburdas, bolsas y de vez en cuando en brindillas coronadas. Hay que conocerlos bien porque se deben mantener en la poda, no se eliminan.
Brindilla
Brindilla
Brindillas simplesMiden 40-50 cm. Todas sus yemas son de madera, es decir, dan lugar a brotes vegetativos, no a flores.
Las brindillas vegetativas deben podarse a 1 ó 2 yemas en lugar de 3 debido a su pequeño vigor, o incluso eliminarlas totalmente si hay ramos alternativos suficientes para realizar la poda sin dejar zonas descubiertas de vegetación.
Brindilla Coronada
Brindillas coronadas
A diferencia de la brindilla simple, tienen una yema en la punta que da lugar a una flor.
Es un ramo corto (10-20 cm.), fino y no muy robusto para soportar el peso de los frutos. Da frutos más pequeños y de peor calidad que dardos y lamburdas. ¿Cómo se tratan?
a) si hay muchos dardos y lamburdas, lo mejor será eliminarla las brindillas coronadas, siempre que ello no deje espacios desnudos.
b) Si no hay dardos y lamburdas en cantidad, la poda de fructificación es selectiva, eliminando totalmente las peores (es decir, las más delgadas, débiles y de peor aspecto) y conservando sin poda algunas, aquellas que nos ofrezcan garantía de fructificación aceptable.
c) Otra opción es no hacer nada y cuando se haga el aclareo de frutos, se eliminan los que estén sobre brindillas débiles sin garantías.
Chupones
El chupón es un ramo excesivamente vigoroso, vertical y que no da fruto. Normalmente, se cortan a ras de su inserción. Los chupones son interesantes para reemplazar ramas en mal estado, eliminando éstas justo por encima del chupón.
Veamos cómo hay que tratar cada uno de estos elementos en la Poda de Fructificación:
Ramas y Ramos
Las ramas tienen más de 2 años de edad, y los ramos, son madera de entre 1 y 2 años de edad. Nos centramos en los ramos, las ramas son gruesas y no se cortan a menos que esté enmarañando en exceso o quede muy inclinada cercana al suelo.
Ramo
Los ramos que no sean estructurales, despúntalos todos sobre la tercera yema contada desde su inserción, excepto los que estorben, que se deben eliminar totalmente. La 3ª yema continuará el crecimiento y las 2 inferiores, evolucionarán a formaciones menos vigorosas (brindillas, dardos, etc.).
Si al año siguiente, de las 2 yemas inferiores no se consiguen elementos fructíferos, sino crecimiento vegetativo, despunta de nuevo el ramo de prolongación sobre una sola yema lateral para forzar de nuevo una sola prolongación vegetativa terminal, y que abajo se diferencien yemas florales. Ya tendremos formaciones fructíferas en posición baja y sin haber dejado que la ramificación se alargue.
En la poda siguiente, se corta por encima de la mejor formación fructífera, y se elimina toda la zona vegetativa de cobertura, dejando elementos fructíferos cortos, robustos, muy próximos a la rama estructural y sin enmarañamiento. La poda así descrita (despuntes cortos) evita copas densas y en cascada (caídas peso), elimina las ramificaciones largas y los espacios vacíos improductivos, a cambio de retrasar a veces, la entrada en producción y de ser muy trabajosa los primeros años.
En árboles bien fertilizados y de crecimientos intensos, vigorosos, en vez de cortar sobre la 3ª yema, se realiza sobre la 5ª, 6ª o 7ª así, aunque 2 ó 3 originan ramos de madera, siempre algunas de las más bajas evolucionarán a formaciones cortas, con lo que estaremos en la misma situación anterior, aunque con vegetación más densa. Así conseguimos que ramos vigorosos y largos no tarden varios años en fructificar.